La economía cántabra crecerá en 2011 un 0,9 por ciento y, aunque el empleo en el conjunto del año no ofrecerá aún tasas positivas, sí que puede empezar a repuntar en los últimos meses, cuando se puede comenzar a crear empleo neto en algunos sectores, unas perspectivas que representan el "punto de partida" para la "recuperación" económica.

Ésa es al menos la previsión que hace el Departamento de Estadística Regional de Funcas (la Fundación de las Cajas de Ahorros) en su análisis de la economía cántabra.

El responsable de dicho departamento, Pablo Alcaide, ha explicado que la situación es "mejor" de lo que se pronosticaba hace un año, pero sin embargo la "incertidumbre" sobre el entorno mundial es "mayor", entre otras cosas, por la subida de los precios de la energía, pero también por la evolución de los tipos de interés. Por ello, cree que no se pueden "echar las campanas al vuelo".

También ha lanzado un mensaje en favor de la confianza. "Gran parte de la solución está en que nosotros mismos nos creamos que se puede salir de esta circunstancia", ha recalcado el responsable de Funcas.

Alcaide ha hecho estas reflexiones al presentar en rueda de prensa el último número de los 'Cuadernos de información económica' de la fundación, en el que se analiza la evolución de la economía en 2010 y la progresión de las regiones en el periodo 2000-2010.

Junto a él, han participado en la rueda de prensa el consejero de Economía y Hacienda, Ángel Agudo; el director de Negocio de Caja Cantabria, Francisco Martínez Sampedro, y el director de Planificación y Control de la entidad, Fernando García Andrés. En principio se había anunciado que en representación de la Caja asistirían el presidente y el director general, Enrique Ambrosio y Javier Eraso, pero les ha surgido un "viaje urgente".

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