Rodrigo García se estrena en el Centro Dramático Nacional y lo hace con Gólgota Picnic, una obra que se inspira en la “fábula” de la Biblia para dar vida a un montaje que, como todos los del director hispano argentino, busca despertar conciencias.

Además de las referencias bíblicas, Gólgota Picnic se apoya en una escenografía brutal –cada día el escenario del María Guerrero se cubrirá de miles de panes de hamburguesa en alusión al milagro de Jesucristo- y en el fuerte protagonismo de la música. El espectáculo cuenta con la presencia del prestigioso director de orquesta y pianista italiano Marino Formenti, quien afronta el reto de aparecer desnudo delante del piano para tocar Las siete últimas palabras de Cristo en la cruz de Joseph Haydn.

Esta especie de “apocalipsis contemporáneo” -como lo ha definido el director del CDN Gerardo Vera- parte de La Biblia como “la fábula más fascinante”, según comenta García, para “despegar hacia otros asuntos, relacionados siempre con la muerte. La muerte como ir a comer el menú del día, no la muerte como el fin del mundo. La música es lo único que se asemeja a la divinidad en esta obra. Por eso intento que ocurra poco y nada en el escenario cuando Marino toca”.

Gólgota picnic está coproducido por el Centro Dramático Nacional, y tras su representación en Madrid hasta febrero, tiene previsto su estreno en el Teatro Garonne de Toulouse y en el Festival de Otoño de París.

GÓLGOTA PICNIC. Teatro María Guerrero (Madrid) / Del 7 de enero al 6 de febrero / http://cdn.mcu.es/