El Ministerio Fiscal ha solicitado hoy una pena global de tres años y medio para el vallisoletano que el pasado día 24 de noviembre fue detenido en el barrio de Pajarillos de la capital por un policía franco de servicio después de que el primero, presuntamente, tratara de asaltar a una cajera del supermercado Día que se disponía a ingresar en una entidad bancaria un total de 8.000 euros de la recaudación.

Los hechos han quedado vistos para sentencia, mediante el procedimiento de juicio rápido, en el Juzgado de lo Penal número 1, donde el representante de la acusación pública ha mantenido para el imputado, Bernardo H.C, su petición de dos años de cárcel por un delito de atentado a agente de la autoridad y otro año y medio más de privación de libertad por un delito de robo con violencia e intimidación en grado de tentativa.

Durante la vista, el acusado, de 46 años y en situación de prisión provisional por esta causa, ha negado que el día de los hechos, sobre las 13.00 horas del pasado miércoles, tratara de apoderarse de la recaudación que la empleada del Día portaba en una saca y, en declaraciones recogidas por Europa Press, ha alegado que chocó casualmente con ella en la calle Cigüeña al doblar una esquina. "Iba ya fuera de hora a tomar la metadona en la Cruz Roja y me encontré de frente con esa joven, que se asustó y echó a correr", ha insistido el presunto asaltante.

Politoxicómano desde los 15 AÑOS

Bernardo H.C, consumidor de drogas desde los 15 años, fundamentalmente de heroína pinchada, y en los últimos ocho años sometido a tratamiento de deshabituación con metadona, ha añadido que el día de los hechos llevaba en su bolsillo 400 euros, "de ahí que no necesitara abordar a nadie", y ha rechazado igualmente que tratara de acometer con una navaja al agente franco de servicio que le detuvo.

La versión del acusado, sin embargo, ha chocado frontalmente con lo relatado por la cajera del súper y el funcionario de Policía Nacional perteneciente a la VII Unidad de Intervención que le redujo. En el primer caso, la testigo ha mantenido que cuando se disponía a ingresar en el banco 8.000 euros de la recaudación notó cómo alguien, "con una gorra y la cara cubierta con unas gafas oscuras y una bufanda", la agarró por detrás y comenzó a tirar de la saca que portaba al hombro.

"Agarré fuerte la cartera, huí y me refugié en una carnicería, hasta que ese hombre salió corriendo", ha recordado aún asustada la empleada del Día, mientras que el agente de paisano que al presenciar los hechos detuvo al supuesto asaltante ha indicado que tuvo que realizar una carrera de casi 100 metros para alcanzar a Bernardo H.C. y que en ese momento este último se dio la vuelta y llegó a esgrimir contra él una navaja.

El agente ha sostenido que llegó a sentirse "intimidado", aunque también ha precisado que el detenido no tuvo "la más mínima opción" de acometerle con el arma porque su actuación fue muy rápida y logró arrojarle al suelo y reducirle en escasos segundos.

Tras los testimonios del acusado y los dos testigos, la acusación pública ha considerado probados los cargos que se imputan al primero, quien, según ha advertido, iba detrás de esos 8.000 euros que constituían su "objeto de deseo", mientras que el defensor ha solicitado un fallo absolutorio basado en la versión del choque accidental entre su patrocinado y la cajera y en que en ningún momento Bernardo H.C. llegó a tratar de atentar contra el funcionario policial.