El presidente del PP cántabro, Ignacio Diego, cree que el presupuesto regional para 2011 es "un auténtico instrumento para el desastre" que "no va a servir para iniciar la superación de la crisis", sino para "agravarla", y en esta situación piensa que la solución "sólo es posible con un cambio de gobierno".

En su intervención en el Pleno del Parlamento para defender la enmienda a la totalidad de los presupuestos presentada por su grupo, Diego ha recriminado al Ejecutivo cántabro que presenta para el próximo año un presupuesto basado en los "mismos parámetros" que utilizaba en las "épocas florecientes", los mismos principios que han llevado a Cantabria a la situación actual y que han demostrado el "fracaso" de su modelo.

"Sus recetas para salir de la crisis no funcionan, pero perseveran en su forma de hacer las cosas y las consecuencias las pagamos todos. Ustedes son el principal problema y, por tanto, cualquier solución pasa por un cambio de modelo, un cambio de gestión, lo que sólo es posible con un cambio de gobierno", ha apostillado el líder del PP.

A su juicio, "hace falta un gobierno que fije un rumbo claro hacia un objetivo que no es otro que salir de la crisis", pero en el actual Ejecutivo no ve ese rumbo ni proyecto, porque es un Gobierno "producto de la cohabitación más o menos conflictiva", en el que falta "dirección y liderazgo" y sólo les une "el interés de perpetuarse en el poder".

El resultado, según Diego, es que socialistas y regionalistas presentan un presupuesto "sin estrategia" ni "objetivos", sin medidas contra la crisis ni planificación de futuro, lo que produce una "crisis de confianza".

Desde su punto de vista, el presupuesto planteado por el Gobierno "lleva inexorablemente al empobrecimiento" de Cantabria porque se sustenta en cuatro principios "erróneos": un mayor esfuerzo fiscal, menor inversión, mayor endeudamiento y la falta de austeridad y transparencia.

En este sentido, ha criticado que las cuentas no son "austeras ni sociales", porque "las restricciones recaen en buena parte" en los sectores más desfavorecidos y la subida de impuestos es un "expolio al ciudadano" sustentado en una "mentira", ya que no se destina a mantener el gasto social, que se reduce "de forma notable", mientras se mantiene en cambio el "abuso de posición de privilegio de quienes gobiernan".

Pero además, ha recalcado que se recortan "considerablemente las inversiones, impidiendo así la recuperación" de algunos sectores y poniendo "en peligro muchos puestos de trabajo".

A esto se añade un "incremento exponencial de la deuda" fruto de la "mala gestión" y de los "años de despilfarro sin rumbo" y que va a "lastrar" el futuro; así como el descenso de la inversión estatal en la región, ante la cual el presidente regional, Miguel Ángel Revilla, responde 'esto es lo que hay'.

Un gobierno "resignado"

Para el líder del PP, Cantabria tiene un Gobierno "fracasado, resignado y que renuncia al regionalismo y a la reivindicación de los derechos de los cántabros". "Son ustedes el principal problema y, por ello, la mejor solución, por no decir la única, es un cambio de gobierno para hacer, justamente, lo contrario de lo que hacen ahora", ha sentenciado.

Diego ha defendido el modelo del PP, que está "en las antípodas" y pasa por la "racionalización de los gastos improductivos"; la limitación del endeudamiento, "vinculado exclusivamente a actuaciones estratégicas"; una "drástica" reducción del sector público empresarial y "ni un euro de incremento en los impuestos a los ciudadanos".

Según Diego, si PRC y PSOE no ven aquí una alternativa, es porque "niegan la existencia de lo que toca".