El fiscal ha pedido pena de cárcel de tres años y medio y multa de 1.200 euros para el dueño de un bar de Astillero por un delito de tráfico de drogas y faltas de amenazas y lesiones.

El Ministerio público también pide 300 euros para un amigo del acusado y 900 para un supuesto deudor, acusado también de faltas y daños.

Los hechos, que se enjuiciarán el próximo miércoles, 10 de noviembre, a partir de las 9.30 horas en la Audiencia Provincial de Cantabria, ocurrieron en febrero de 2006, cuando tres hombres se amenazaron y agredieron entre sí por una deuda en un asunto de tráfico de drogas.

Según el escrito del fiscal, uno de los acusados, enviado por otro de los imputados que se dedicaba al tráfico de drogas y regentaba un bar en Astillero, se presentó en el Barrio Obrero reclamando al tercero de los acusados una deuda que había contraído con su amigo por la venta de cinco gramos de cocaína. Le amenazó con pegarle dos tiros si no pagaba los 220 euros que debía a su amigo.

Días después, el que presuntamente tenía esa deuda acudió con un palo al pub para ver a quien supuestamente le había vendido la droga y le había enviado a un amigo para amenazarle.

Entonces, el hombre le dijo que le iba a matar y rompió diversos efectos del local, valorados en 375 euros, a lo que el dueño del bar contestó arrojándole varias botellas que le produjeron diversas heridas en los brazos.

Ante el revuelo en el bar, la Guardia Civil se personó en el local y procedió a registrarlo. En el almacén encontró al dueño que se tragó una bolsa pequeña de color blanco a pesar del forcejeo con un sargento que trató de evitarlo. En el cacheo, le encontraron dinero procedente de la venta ilegal de droga así como dos bolsitas con anfetamina.

El Ministerio Fiscal califica los hechos como un delito contra la salud pública de sustancias que causan grave daño y tres faltas de amenazas, daños y lesiones.

Por ello, solicita para el dueño del pub pena de tres años y medio de prisión por el delito contra la salud pública y multa de 1.200 euros por las faltas de amenazas y de lesiones. Para el amigo de éste pide 300 euros por la falta de amenazas, y para el supuesto deudor, 600 euros por las faltas de amenazas y daños.

Por su parte, la defensa de las distintas partes pide la absolución de sus patrocinados.