La ministra de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, Elena Espinosa, ha afirmado que el Gobierno seguirá "reforzando y apoyando" la aplicación de la Norma de Calidad del Ibérico, en colaboración con las comunidades autónomas, con el propósito de "detectar y poner" freno a los posibles fraudes que se puedan producir en el mercado, al tiempo que continuará "revisando, y mejorando en su caso, los actuales controles a lo largo toda la cadena".

En respuesta a una pregunta formulada por el Grupo Parlamentario Socialista en el Pleno del Senado, Espinosa ha informado de que el Ministerio ha impulsado a través de los gobiernos autonómicos una campaña de inspección oficial en la industria del sector para verificar el cumplimiento de la norma de calidad, lo que, según aseguró, ha "mejorado la lealtad en las transacciones comerciales entre operadores".

"Como resultado de estas operaciones, se aprecian mejoras en los productos comercializados en cuanto a su correcto etiquetado y el conocimiento del consumidor", comentó la ministra.

Espinosa ha detallado que la norma de calidad del ibérico, publicada en 2007, tenía entre otros objetivos mejorar el control, el conocimiento de los consumidores y aumentar la transparencia de las transacciones comerciales.

Esta norma ha propiciado la puesta en marcha de dos nuevos instrumentos, la mesa del ibérico, con la participación del Gobierno y comunidades autónomas para lograr una mayor "armonización" en las actuaciones de control, y el registro general informativo de organismos independientes de control, para obtener información periódica sobre los animales y los productos comercializados bajo la norma.