El Instituto Armado informó hoy de que tras un dispositivo de vigilancia, el presunto autor de los robos fue detenido in fraganti dentro de un bar. Tras indagaciones posteriores, los agentes constataron que dos vecinos, dueños de uno de los bares robados, aprovecharon el suceso para incrementar las indemnizaciones solicitadas a sus aseguradoras.

Según la nota de la Guardia Civil, las investigaciones policiales, que se iniciaron en diciembre del pasado año por el incremento de robos en los bares del polígono de Humanes, permitieron constatar que la mayoría de las acciones tenían un modus operandi similar.

El presunto ladrón accedía por el tejado "separando una lámina de uralita y rompiendo posteriormente la escayola", y en menos de cinco minutos "se hacía con el botín". Los robos se producían a última hora de la tarde durante los fines de semana en bares situados en los extremos del polígono, cerca de caminos de tierra, para "facilitar la huida" de su autor.

Otros tres detenidos por cometer 42 robos

Por otro lado, la Policía ha detenido en Madrid a dos hombres y una mujer, quienes presuntamente han cometido 42 robos, empleando en ellos una violencia extrema ya que iban armados con pistolas y armas blancas, con las que intimidaban y agredían a sus víctimas.

Según informa la Jefatura Superior de Policía, las detenciones se practicaron el pasado viernes, tras los pesquisas de los agentes de la Comisaría de Retiro que perseguían en las últimas semanas a Raúl S.C., de 39 años, José Manuel P.C., de 33 y Rebeca C.M., de 29, todos de nacionalidad española y con numerosos antecedentes policiales.

Como en el caso anterior, la Policía había recibido denuncias de robos que se cometían siguiendo el mismo patrón. Actuaban las tres personas: dos entraban en el local elegido, una hacía labores de vigilancia y la segunda se apoderaba del género, mientras la tercera esperaba fuera en un coche en marcha para emprender la huida. Las víctimas declararon a la Policía que los delincuentes actuaban con una gran violencia pues iban armados y proferían amenazas y golpes a los atracados, a quienes los detenidos no dudaban en encerrar en la trastienda del local, si había en éste.

El pasado viernes, los agentes consiguieron arrestar a los tres al sorprenderles tras haber cometido un atraco con pistola en un comercio de telefonía móvil del que intentaban huir, ubicado en la calle de O'Donell.

Los detenidos ofrecieron gran resistencia e incluso uno de los agentes resultó lesionado, pero al final fueron arrestados en plena calle y, según la Jefatura, los policías fueron aplaudidos por los viandantes.

Una colección de denuncias

Raúl tenía en vigor tres reclamaciones judiciales por quebrantamiento de condena, una identidad falsa y trece detenciones por robos con violencia e intimidación, lesiones y tráfico de drogas.

José Manuel había sido arrestado en una veintena de ocasiones por robos con intimidación y con fuerza, mientras que a Rebeca le constaban tres detenciones también por robo con fuerza y daños.

Los tres han pasado a disposición judicial, pero los investigadores continúan con sus trabajos para esclarecer otros hechos cometidos en Comisarías limítrofes en los que pudieran estar implicados.

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