Los Mossos d'Esquadra han detenido en las últimas semanas a seis presuntos ladrones acusados de cometer unos 70 robos a turistas que circulan por la AP-7, a los que distraen avisándoles de que tienen un pinchazo y, al detener su vehículo, aprovechan un despiste para robarles objetos de valor.

Según han informado fuentes de la policía catalana, los Mossos d'Esquadra han reforzado, como hacen cada verano, los dispositivos de seguridad en las autopistas de Cataluña, en colaboración con la red de vigilantes de las áreas de servicio y de las concesionarias de autopistas, con motivo de la mayor afluencia de vehículos durante la época estival.

De esta forma, en las últimas semanas los Mossos han detenido a seis supuestos ladrones, de los que cuatro -entre ellos dos reincidentes que ya fueron arrestados en otra operación en diciembre pasado- ya han ingresado en prisión.

Estos seis detenidos, que integran dos grupos muy activos, están acusados al menos de cometer unos 70 robos a turistas que circulan por la AP-7, a los que, cuando están con los vehículos en marcha, les advierten de que sufren un falso reventón para que paren su vehículo y, cuando lo detienen, aprovechan un despiste para robarles sus objetos de valor.

Los seis detenidos, vecinos de Cornellà de Llobregat, L'Hospitalet de Llobregat y de Barcelona, guardaban en un inmueble un centenar de objetos robados, que ya han empezado a ser devueltos a sus propietarios en su país de origen.

Paralelamente, los Mossos han reforzado su presencia en las áreas de servicio de las autopistas, especialmente en la AP-7, la más transitada por turistas que llegan desde Francia por carretera, para evitar robos de viajeros que se paran a descansar o a repostar en estas zonas de descanso.

Entre enero y finales de julio pasado, los Mossos d'Esquadra practicaron uno total de 210 detenciones -algunas a las mismas personas, reincidentes- por distintos robos y hurtos cometidos a lo largo de la AP-7.