La vicepresidenta de Cantabria, Dolores Gorostiaga, y el consejero de Medio Ambiente de Aragón, Alfredo Boné, han firmado hoy un protocolo de colaboración entre ambos gobiernos autonómicos para desarrollar un programa de cooperación e intercambio de experiencias en el ámbito de la educación y sensibilización ambiental.

Entre las iniciativas que se pondrán en marcha a través de este convenio, destaca la elaboración de un Plan de Calidad de los Ríos y la colaboración en el desarrollo del concepto de Valle del Ebro como Espacio Natural Integrado, así como su divulgación a nivel internacional y la búsqueda de adhesión de otras comunidades autónomas.

El convenio también recoge la realización de seminarios sobre estrategias de educación ambiental y encuentros de gestores y técnicos con el fin de cooperar en los modelos de participación y dinamización de planes y programas de gestión ambiental.

En este sentido, Aragón aportará sus experiencias a través de programas de educación ambiental como 'Actúa con energía', centrado en el cambio climático, o 'Aragón limpio', que promueve la cooperación en acciones dirigidas a jóvenes y escolares sobre buenas prácticas ambientales en campamentos y colonias.

Ambos gobiernos también compartirán experiencias extraídas de la elaboración de las Estrategias de Educación Ambiental. En el caso de Aragón, la Estrategia Aragonesa de Educación Ambiental (EAREA) cuenta con 356 entidades adheridas y hay formulados 80 compromisos para la acción. Por otra parte, el Gobierno cántabro contribuirá con los resultados obtenidos en programas de sensibilización sobre agua y residuos.

En cuanto a la cooperación en temas de desarrollo sostenible y cohesión territorial, el Gobierno de Cantabria ha puesto en marcha la Red Local de Sostenibilidad que integra a más del 97% de la población de la región, impulsa la actividad de las Agendas 21 Locales y puede servir de ejemplo para iniciativas, basadas en el consenso y en la participación ciudadana, en temas medioambientales.

Por parte del Gobierno de Aragón, se dará a conocer una iniciativa pionera en España, el Aula de Medio Ambiente Urbano denominada 'La calle indiscreta', dedicada a la información y sensibilización de las presiones urbanas y que pretende ayudar a reconocer, interpretar e imaginar escenarios sostenibles para el medio ambiente urbano.

Otra línea de colaboración estará centrada en temas de control de calidad ambiental. El Gobierno cántabro cuenta con el Centro de Investigación del Medio Ambiente (CIMA), dedicado al control y monitorización ambiental de la cuenca del Ebro como espacio natural integrado. Al mismo tiempo, el Gobierno de Aragón conocerá las actividades y programas que desempeña el CIMA en los Centros de Interpretación de Fontibre, Corconte y en la goleta 'Cantabria Infinita'.

Ambos gobiernos colaborarán también en materia hidrológica. El Gobierno de Aragón aportará las experiencias obtenidas a través de la actividad del Centro Internacional del Agua y el Medio Ambiente (CIAMA), dedicado a la realización de estudios e investigaciones en materia de agua y medio ambiente, y que se ha convertido en referente internacional en este campo.

Por su parte, el Gobierno cántabro expondrá dos iniciativas: el Plan Integral de Ahorro de Agua y la Oficina de Participación Hidrológica, ambas experiencias han resultado un éxito para reducir y racionalizar el consumo de agua en Cantabria, y para la elaboración de los planes hidrológicos de las cuencas de la región, respectivamente.

Cantabria también pondrá sobre la mesa el éxito de participación de voluntarios del 'Proyecto Ríos', donde 1.500 voluntarios, en 200 grupos, han desarrollado una vigilancia en diversos tramos de las cuencas fluviales, con el objeto de vigilar la calidad de sus aguas y su diversidad, tanto animal como vegetal.

Más que un eje geográfico

Según Dolores Gorostiaga, este convenio pone de manifiesto la importancia de la cooperación entre comunidades autónomas en beneficio de los ciudadanos, que en este caso tiene, si cabe aún más importancia, porque Cantabria y Aragón "están unidos" geográfica y afectivamente, gracias al río Ebro, una cuenca que da a ambas comunidades buena parte de su estructura paisajística y social, dijo.

Señaló que Cantabria y Aragón van a "poner en valor" el Ebro, por "lo mucho" que aportan sus aguas y a "poner un énfasis especial" en transmitírselo a los más jóvenes, y a los cántabros y aragoneses.

Gorostiaga destacó que con este acuerdo se persigue desarrollar y extender el concepto de Valle del Ebro como un Espacio Natural Integrado, divulgando su importancia a nivel internacional y nacional, buscando la adhesión de otras comunidades para, así, devolver al río "lo mucho que nos da y que los cántabros y los aragoneses lo tengan siempre muy presentes".

Por su parte, el consejero aragonés de Medio Ambiente afirmó que para su Comunidad _que representa el 40% del territorio de la cuenca y casi el 50% de la población_ el Ebro es "mucho más que un eje geográfico ya que es un eje económico, social, histórico y cultural".

Para Boné, a ambas comunidades les une el "interés mutuo" en las políticas medioambientales. Explicó que a Aragón le interesa especialmente el "histórico" Centro de Investigación de Medio Ambiente de Cantabria; la Red Local de Sostenibilidad, que calificó de "referente" o, las acciones de sensibilización y educación ambiental o el Plan Integral de Ahorro de Agua, entre otras medidas.