Miley Cyrus sigue tratando de defenderse ante los medios. Desde sus recientes actuaciones, tanto en televisión como su concierto en Rock in Rio-Madrid, y también por su último videoclip (Can't be tamed) no han parado de lloverle críticas sobre su drástico cambio de imagen.

La joven actriz, que hace una semana arremetía contra sus paisanos por este motivo, aseguró, en una entrevista a Ok Magazine, que no trata de vender una imagen obscena. "No trato de vestir como una prostituta. Mi intención no es ir a una discoteca y ligarme a un grupo de tíos. Lo único que estoy intentando es que concuerde mi música con la forma en la que me visto", explicaba Cyrus. "Me siento cómoda vistiendo con algo menos de tela. Así he sido siempre", añadía Miley. "Ahora tengo la posibilidad de hacerlo con un poco más de libertad. Así soy yo ahora", concluía.

Lo cierto es que en EE UU está creciendo el debate acerca de si la que fuese Hannah Montana es demasiado joven (tiene 17 años) para mostrarse de esa manera en público. Esta semana, sin ir más lejos, el popular bloguero Perez Hilton se ha visto envuelto en una polémica por haber colgado una foto en la que Cyrus enseñaba de más al bajar de un coche. Retiró el enlace, que dejó en su twitter, por temor a que se le pudiese acusar de pornografía infantil, según recogieron varios medios estadounidenses.

Nuevos proyectos en la gran pantalla

Afortunadamente para Cyrus, los proyectos siguen también lloviéndole. Su carrera de actriz no parece que vaya a verse estancada por la intensa promoción que está llevando a cabo de su último disco y ya conocemos una producción que contará con Miley como protagonista. Una cinta que llevará por título Wake (Despierta) y, según informa The Hollywood Reporter, se trata de una adaptación de la novela de Lisa McMann que producirán Paramount Pictures y MTV Films.

Wake es la primera de una trilogía que está protagonizada por Janie, una joven a la que dará vida Cyrus en la gran pantalla, y que, cual Freddy Krueger, tiene la habilidad de poder meterse en los sueños de las personas. Esta novela abre una trilogía que seguirán los títulos de Fade y Gone.