El economista Gonzalo Anes aplaudió hoy las medidas anunciadas por el Gobierno de España para hacer frente a la crisis, pero se opuso a una subida de los impuestos porque es "todo lo contrario a una buena receta para el crecimiento económico". "Vivimos uno de los momentos más difíciles de la historia de España", aseguró.

Anes viajó a Oviedo para participar en las deliberaciones del Jurado que fallará mañana el Premio Príncipe de Asturias de Ciencias Sociales, segundo de los ocho galardones que entrega anualmente la Fundación del mismo nombre.

Miembro del Patronato y actual director de la Real Academia de la Historia, se mostró partidario de dejar el dinero "en los bolsillos de los particulares" porque estos, a diferencia del Estado, "lo invierten con mucho cuidado".

Junto a la importancia de que las "tardías" medidas del Gobierno "se cumplan", defendió acometer otras como incrementar la productividad nacional y el ahorro. "Ahora todo es poco", subrayó.

En términos similares se manifestó el presidente de la Federación Asturiana de Empresarios (FADE), Severino García Vigón, quien apostó por incrementar la eficacia en la gestión de los gastos antes de abordar una subida de impuestos a las clases más altas, como baraja el Ejecutivo.

Miembro por primera vez del Jurado del Premio Príncipe de Asturias de Ciencias Sociales 2010, Vigón discrepó de la conveniencia de una huelga porque "es el momento de arrimar el hombro".

El presidente de la patronal asturiana instó además a que las medidas anunciadas por el Ejecutivo para equilibrar las finanzas públicas se entiendan como "fruto de modernidad" y advirtió de que habrá que abordar otras, entre las que citó las reformas de los mercados laboral y financiero y la simplificación de la burocracia.

No obstante, rechazó la subida de dos puntos en el IVA prevista para el mes de julio "que pagamos todos" y lamentó que el resto de las actuaciones "llegan tarde". "Parece que algunos se han enterado ahora de la crisis, cuando empresarios y trabajadores lo han sabido desde hace dos años", dijo.

A su juicio, la actual coyuntura económica pone en peligro la credibilidad de España en el plan de viabilidad para lograr que en el año 2013 el déficit nacional pase del 11,4 a "menos del tres por ciento del PIB".