Representantes de Bodegas Familiares de Rioja calificaron hoy de "muy buena" la añada del pasado año 2009, que mañana podrá conocerse con la presencia de cien vinos, de 25 bodegas, en la XII Cata Presentación, que se celebrará a las 19:00 horas en Riojaforum.

Luis Manuel Carcar, director técnico de Bodegas Bagordi; y Alberto Pedrajo, de Honorio Rubio, ofrecieron una rueda de prensa en la que Pedrajo destacó la presencia, en la cata de mañana, de vinos ecológicos.

También, de caldos de garbacha, una variedad que, este año, señaló, ha resultado "sorprendente" y viura, que ha tenido un resultado, dijo, "fresco, elegante y aromático" que ha puesto en valor esta variedad.

Carcar relató cómo la añada del pasado año tuvo un ciclo vegetativo de la uva que comenzó con normalidad a principios de abril. También siguieron la tónica de normalidad el florecimiento y cuajado, aunque este último denotó un pequeño adelantamiento.

En julio, continuó, ya se apreciaba una semana de adelanto y, así, el 23 de agosto comenzaba la vendimia en Aldeanueva de Ebro, lo que supuso que se adelantó quince días con respecto a la del año 2008.

Explicó que los viticultores vivieron con "miedo" cierto "desajuste" en la maduración que, a causa de la climatología, se fue "ralentizando". Fue, completó Pedrajo, una añada "complicada" que se pudo "sacar adelante" y que ha resultado "si no excelente, muy buena".

Incapacidad comercial

Con respecto a la situación actual del sector vitivinícola, Pedrajo consideró, como opinión personal y no de Bodegas Familiares, que "Rioja no tiene un problema de excedente, sino de incapacidad comercial".

A su juicio, hay que "salir fuera" a vender, aunque lo "cómodo sea hacerlo desde la bodega". Para ello, se refirió a las bodegas alemanas, donde "el hijo del dueño coge unas botellas y se va por el mundo a venderlas".

Con respecto a los precios, indicó que, desde la asociación, "por supuesto que se defiende un precio de la uva que no sea inferior al de producción". A ese respecto, recordó que muchos son "productores".

No obstante, siguiendo con su opinión personal, afirmó que "hace diez años la uva estaba a cuatrocientas pesetas, y ahora a cincuenta, o sesenta, pero eso está pasando en todo el continente por la crisis".

A su juicio, estas oscilaciones de precio no son convenientes y consideró que, si bien no se puede marcar un precio fijo, si acordar uno orientativo.

En la producción, añadió Carcar, la propuesta de la asociación es la de reducir un dos por ciento la transformación de la uva en vino, aunque apoyarían un diez por ciento si se acordara en la Interprofesional.