La exposición es una aproximación a la estética creativa y discursiva de Javier Medina, abogado, cineasta, hombre culto y surrealista militante y convencido, según la definición de Carlos José Martínez Fernández, comisario de la muestra. El jurista gijonés, que compaginó su trabajo en un conocido bufete con singulares proyectos artísticos y cinematográficos, murió a los 62 años tras un infarto en el verano de 2008.

La muestra se apoya en tres pilares fundamentales: una serie de infografías de Medina, recopiladas por el artista Ramón Isidoro; un documental, "Ne me quitte pas", bajo la dirección artística e idea del comisario, y con la dirección técnica de Nacho de la Vega y Cristina de Silva, con testimonio de sus amigos y familiares; y un libro de título homónimo al de la exposición en el que se encuentran las infografías completas, algún ejemplo de sus escritos, publicados en la prensa local durante años, y una foto-biografía con dos colaboraciones de Vicente Díaz Faixat y de Rubén Paniceres, buenos conocedores del trabajo cinematográfico de Javier Medina.