Una familia colombiana ha denunciado a los Mossos d'Esquadra por presuntamente haberles propinado una paliza "indiscriminada" en una céntrica plaza de Tarragona, aunque los Mossos d'Esquadra niegan los hechos y ha detenido a seis personas por participar en una pelea y forcejear con los agentes tras negarse a identificarse.

La policía catalana ha denunciado a su vez a los detenidos por atentado a la autoridad (dos agentes resultaron heridos leves) y desorden público, por lo que será ahora el juez de Instrucción el encargado de resolver el caso. Los denunciantes celebraron la noche del sábado al domingo una fiesta de cumpleaños en un local de ocio nocturno del Puerto Deportivo.

Los Mossos recibieron varias llamadas alertando de una pelea en la plaza dels Carros y cuando llegaron al lugar, los participantes se negaron a identificarse y provocaron un forcejeo. Tras la intervención policial, el abogado de la familia interpuso este fin de semana una denuncia contra los agentes por lesiones y abuso de autoridad.

Hercilia, una de las agredidas, explica que los agentes le pegaron en la cara y en el cuerpo "de forma contundente, sin dar ninguna explicación". Con visibles hematomas en muslos y barriga, afirma que la agresión "no se entiende" porque ellos estaban "muy tranquilos y de fiesta".

Por su parte Álex, hijo de Hercilia, narra que los agentes le "pegaban e insultaban" mientras le gritaban que era "basura". Este joven asegura que los Mossos le "golpearon en el costado y en el ojo muchas veces" sin darle tiempo a documentarse ni a defenderse.

"Cuando vi a mi hijo Álex en el suelo, con sangre, solo pude decir que si tenían algo contra él o contra alguno de nosotros, pues que se lo llevaran al calabozo pero que no le pegaran", relató Hercilia.

Los hechos se remontan a la madrugada del domingo, cuando siete personas de una misma familia abandonaron el Puerto Deportivo de Tarragona, tras haber celebrado un cumpleaños en uno de los locales de ocio de la zona. Según Hercilia, al cruzar un paso a nivel encontraron a un conocido "herido con lesiones en un pie" y lo intentaron ayudar, "fue entonces cuando empezaron los golpes".

Los Mossos niegan esta versión, y señalan que fueron transeúntes que se encontraban en la zona los que señalaron a Álex como uno de los principales instigadores de la pelea previa que les llevó hasta el lugar. Al requerir que se identificara, éste se negó e inició un forcejeo, en el que participaron también miembros de su familia.

Fuentes próximas al caso señalan que alguno de los detenidos, entre ellos Álex, cuentan con antecedentes policiales por varios delitos de robo con fuerza, y que además se ha acreditado su participación en otros sucesos similares, como una pelea multitudinaria ocurrida en Reus (Tarragona) en agosto.