El juzgado de lo Penal número dos de Jaén ha multado a un repartidor de pizzas por denunciar que le habían robado un pedido que transportaba y la recaudación cuando en realidad lo que hizo fue distribuir la comida y el dinero con otras dos personas, que también han sido multadas.

El fallo judicial recoge como hechos probados que el repartidor compareció en la comisaría de Linares (Jaén) para denunciar que había sufrido un robo con intimidación por parte de unas personas que se apoderaron del pedido que llevaba y del dinero que tenía.

El representante legal de la empresa en la que trabajaba el condenado reclama la cantidad de 341 euros por los perjuicios ocasionados, dinero que ya ha sido abonado.

En definitiva, el juzgado condenó al repartidor de pizzas por un delito de denuncia falsa y por una falta de apropiación indebida al pago de una multa de 1.170 euros, que "se harán efectivos en cuatro plazos mensuales a razón de 292,50 euros cada mes". Igualmente, condena a los otros dos acusados por dos faltas de hurto a que abonen cada uno de ellos una multa de 180 euros.

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