Sólo hay 1.100 plazas para más de 900.000 personas en toda España. Ésta es la realidad de los centros de internamiento para inmigrantes en el país, según denuncia Andalucía Acoge . Esta federación de ayuda al inmigrante informó ayer de la situación actual de este colectivo en la región y como uno de los principales problemas señaló los centros de internamiento.

«El propio ministro ha reconocido que están saturados, por lo que los inmigrantes están en pésimas condiciones. Son cárceles oscuras. No se sabe qué pasa ahí dentro», denuncia Ángel Madero, presidente de Andalucía Acoge. Por ello, la federación exige «el cierre inmediato de este tipo de instalaciones que vulneran los derechos de los inmigrantes que detienen».

Se quedan sin papeles

La federación advierte que están aumentando los inmigrantes que pierden sus papeles y vuelven a quedarse en situación irregular «por culpa de los duros requisitos de las oficinas de extranjerías». Son personas que «han perdido el trabajo y en unos meses van a acabar su período de desempleo».

Por eso piden al Gobierno que se flexibilice la renovación de las tarjetas de residencia y trabajo para «no engrosar las cifras de personas en situación irregular que dificulten aún más el acceso a un puesto de trabajo».

Según los últimos datos que maneja la asociación, se ha producido un incremento de más de 900.000 personas en la bolsa de extranjeros irregulares, «de los que un 10% están en Andalucía», calculan, es decir, más de 90.000 personas. De hecho, «el 65% ó 70% de nuestros usuarios en 2008 fueron indocumentados».

A fecha de 31 de diciembre había en Andalucía 524.771 extranjeros con certificado de registro o tarjeta de residencia, según los datos de la Oficina de Extranjería.

“Sienten miedo”

El perfil actual del inmigrante en Andalucía es el de un joven que lleva entre uno y dos años aquí, con pareja o casado y «con la idea de echar raíces en Andalucía y ser un ciudadano más». Las procedencias mayoritarias siguen siendo de Marruecos y Ecuador, aunque también han aumentado los ciudadanos de Europa del Este.

Según el secretario de Andalucía Acoge, José Miguel Morales, la palabra que describe su situación es «el miedo. Sienten miedo a las redadas policiales y a lo que le vaya a pasar».

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