Tras el repentino y trágico fallecimiento de su esposa, la actriz Natasha Richardson, Liam Neeson está "desorientado", según afirman sus propios familiares a los medios.

El actor, de 56 años, se encuentra todavía en estado de shock debido a la muerte de Richardson este pasado miércoles, tras sufrir una caída el lunes durante una clase de esquí . Neeson ha suspendido su participación en el rodaje de su último film, Chloe, incapaz de continuar con el trabajo, cuenta El Mundo, que cita a la revista Hollywood Reporter.

Neeson se hallaba en Toronto, Canadá, rodando con el director Atom Egoyan y junto a Julianne Moore , cuando Richardson sufrió el accidente, que en principio no hizo sospechar a nadie de su gravedad.

Según su representante, Catherine Lacasse, la actriz, de 45 años, no tenía heridas visibles, hablaba y andaba perfectamente, e incluso bromeaba. Fue al cabo de una hora cuando Richardson se quejó de unos dolores de cabeza y fue llevada a un hospital de Montreal.

Finalmente, la actriz fallecía este miércoles, ya en Nueva York, a consecuencia de un coágulo en la meninge, producido por el fuerte golpe que recibió en la cabeza.

Fue decisión de los familiares el desconectarla de las máquinas que la mantenían con vida, ya que su situación era irreversible y se hallaba en estado de muerte cerebral.

Su madre, la gran dama del teatro y del cine de los años sesenta, Vanessa Redgrave, se desmayó en el momento de la muerte de su hija. La hermana de Natasha, Bernadette, aseguró a los medios que se hallaban "conmocionados" y que tan sólo deseaban "poder dar marcha atrás al reloj" y haber podido evitar el fatal accidente.

Liam Neeson, que se hallaba inmerso en el rodaje, tuvo que viajar desde Montreal a Nueva York. Allí recibió una gran oleada de cariño y apoyo de sus hijos, Michael, de 13 años, y Daniel, de 12, así como de su cuñada, la también actriz Joely Richardson; muchas otras estrellas se congregaron para darle el pésame y ayudarle a superar estos complicados momentos, como el matrimonio formado por Sarah Jessica Parker y Matthew Broderick, que recibieron al actor en las puertas del hospital de Manhattan, Nueva York, donde falleció Richardson.

También acudió la legendaria Lauren Bacall a dar su pésame, así como Meryl Streep y la escritora Joan Didion. El ex-marido de Richardson, el productor Robert Fox, también hizo acto de presencia.

"Liam es un hombre muy fuerte. Estoy seguro de que ahora está conmocionado, pero le deseo lo mejor." dijo un amigo de la familia, Regis Philbin.

Según varias publicaciones, Neeson tiene planeado organizar un funeral de carácter íntimo, que más tarde podría ser complementado con un acto público para los fans de la actriz, que gozaba de gran popularidad entre las tablas de Broadway.

Richardson, que ganó en 1998 un prestigioso premio Tony por su actuación en Broadway por la obra Cabaret, será homenajeada con un gesto de respeto: apagar durante un minuto las luces de todos los teatros de esta popular zona céntrica de Nueva York.