La abogada de Valentín Moreno y su hermano Israel, detenidos junto a otros tres jugadores del Bada Bing por la agresión a un equipo de Tercera División, ha negado  que la trifulca tuviera motivos racistas y ha asegurado que el suceso se ha desorbitado, ya que todo se debió a un lance deportivo.

La abogada, Teresa Marugán, ha señalado que, según le han relatado ambos hermanos, los incidentes se limitaron a una "pelea aceptada por los dos equipos" en la que los jugadores del Bada Bing también sufrieron lesiones, como cree que quedará demostrado con los partes médicos. No obstante, Marugán ha asumido que tras este incidente, tanto si se trata de una agresión como de una pelea, Instituciones Penitenciarias le

"Pienso que legalmente no tendría que ser así, porque Valentín, como el resto de ciudadanos de este país, tiene derecho a la presunción de inocencia y además el hecho de que se encontrara allí no quiere decir que fuera uno de los agresores", ha añadido.

Por este motivo, ha afirmado que confía en que el juez deje en libertad a los detenidos, al estimar que "se han desorbitado los hechos, y no deja de ser un delito de lesiones".

Usaron fichas falsas

Los cinco detenidos, todos de nacionalidad española, están acusados, según han informado los Mossos d'Esquadra, de un delito de lesiones, robo con violencia e intimidación, desórdenes públicos, amenazas, daños y contra la integridad moral y falta de lesiones.

La policía catalana ha explicado que la identificación de los jugadores del Bada Bing se ha visto dificultada porque algunos de ellos disputaron aquel partido utilizando fichas federativas falsificadas.

Además de los dos hermanos Moreno, Valentín, de 26 años, e Israel, de 29, ambos vecinos de Sant Adrià de Besós (Barcelona), los otros detenidos son José Luis E.S., de 26 años y vecino de Barcelona, Jonathan P.F., de 29 años y vecino de Sant Feliu de Llobregat (Barcelona), y Carlos R.G., de 26 años y vecino de Barcelona. Los cinco detenidos, que

La agresión se produjo el pasado sábado 10 de enero durante el transcurso del partido, en el campo Municipal Menorca, entre el equipo de los detenidos y el Rosario Central, correspondiente a la Liga de Tercera Regional, después de que el árbitro expulsó a un jugador del Bada Bing.

Las víctimas, todas ellas jugadores del Rosario Central, sufrieron golpes en el cuerpo y fueron insultados e increpados por sus agresores, que se refirieron en tono despectivo a su origen sudamericano, han informado los Mossos.