Un parche transdérmico para el tratamiento de enfermos de Alzheimer leves o moderadamente graves ha sido presentado en Barcelona coincidiendo con la celebración de la reunión anual de la Sociedad Española de Neurología.

El nuevo parche, que

debe colocarse cada día, garantiza una dosis adecuada estable y permite comprobar visualmente si se cumple con la medicación, lo que facilita el control por parte de los cuidadores, según la jefa clínica del Servicio de Neurología del Hospital Valld'Hebron de Barcelona, Mercè Boada.

Boada ha indicado que el parche reduce al mínimo los efectos secundarios gastrointestinales observados con las formas orales del fármaco, y la incidencia de vómitos y molestias que provoca en algunos pacientes. Hasta ahora los tratamientos para la enfermedad de Alzheimer, que afecta a unas

500.000 personas en España y a unos 24 millones en todo el mundo, se suministraban por vía oral.