Se trata de un programa específico y coordinado de asistencia que ya se ha puesto en marcha. En este momento beneficia, de forma experimental, a un grupo de veinte personas, aunque irá en aumento, según informó la responsable del área de Servicios Sociales, Flor Ardanuy. Para la asistencia se tiene en cuenta la edad de los ancianos, sus enfermedades y dependencia y, sobre todo, el grado de soledad en el que viven.

"La mayoría de estas personas mayores viven solas y, además, tienen una mala situación económica, dijo Ardanuy, por lo que el objetivo fundamental de esta iniciativa es "conocer los problemas cotidianos de los ancianos para garantizar su seguridad en el hogar, así como ofrecer soporte psicológico para que se sientan amparados y mejoren su calidad de vida".

El Programa de Prevención también ofrece asistencia directa si se produce algún incidente o situación especialmente difícil. El equipo de personas que forman este programa se reúne cada dos meses y realiza visitas de control al domicilio de los ancianos cada seis meses. La mayoría de los 20 ancianos que reciben este servicio cuentan ya con teleasistencia o telealarma, lo cual facilita el trabajo.

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