Los protagonistas de esta historia son otros reptiles, los camaleones, que se pueden encontrar fácilmente en la zona de Tentegorra, La Algameca y El Portús, a pesar de ser animales originarios del norte de África.

La explicación está en "los militares que viajaban al norte de África sobre 1950, que los adquirían como mascotas y luego los soltaban en la base naval de La Algameca", explica Jorge Sánchez, de la Asociación de Naturalistas del Sureste (Anse).

Según los ecologistas, la población de camaleones en Cartagena ronda los 20 individuos por hectárea, por lo que sólo en el parque municipal puede haber unos 80 camaleones. Las principales amenazas para estos animales, que viven entre uno y dos años, son, según Anse, "el desmesurado crecimiento urbanístico, los incendios forestales, los atropellos y los gatos". Además de en Cartagena, hay poblaciones de camaleones en las salinas de San Pedro del Pinatar y en El Valle, en Murcia, aunque "se desconoce cómo llegaron allí", explica Jorge Sánchez.

En julio sufrieron un incendio

El último gran problema al que se han enfrentado los camaleones cartageneros fue el incendio que se declaró el pasado mes de julio en un campo de tiro del Monte Roldán y que devastó unas 60 hectáreas. Los ecologistas denunciaron que este fuego pudo acabar con grandes poblaciones de camaleones, que no pudieron escapar por su lentitud. La asociación Anse, además, recuerda que «el camaleón es una especie protegida por la legislación estatal y europea y por tanto no debe capturarse». Además, duran poco en cautividad.