En este polémico montaje operístico, tratándose de una producción de Bieito, Don Juan es un cocainómano en el ambiente de la noche barcelonesa actual. La obra se estrenó con el consiguiente revuelo mediático, y de crítica y público, en el año 2002.
La puesta en escena se podrá ver hoy, el viernes, el domingo y el miércoles 30 de julio. El barítono británico Simon Keenlyside protagoniza el papel del Don Juan toxicómano, Ángeles Blancas el de Doña Ana y El Comendador corre a cargo de Günther Groissböck.
El libreto de Lorenzo Da Pontem parte de la obra original de Tirso de Molina El Burlador de Sevilla y del libreto que Giovanni Bertati escribió para la ópera de Guiseppe Gazzaniga, Don Giovanni Tenorio o sia il convitato di pietra.
Comportamiento irresponsable
El Don Giovanni de Mozart fue la primera pieza del compositor austriaco que se estrenó en el Liceu, en 1886. El Don Juan de Bieito se deja llevar por la droga, el sexo y el alcohol y se presenta como un hombre adicto y autodestructivo.
El egocéntrico y superficial protagonista que nos presenta el director leonés, barcelonés de adopción, difiere del clásico, que actúa más bien por egoísmo personal.
El Don Juan moderno de esta obra lírica morirá a manos de aquellos a los que ha salpicado con su comportamiento irresponsable. Y no a manos de Dios, como sucede con el moralista Don Juan del pasado.
*La Rambla, 41-49. A las 20.00 horas. De 7 a 69 euros.
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