Ana Obregón presentaba hoy en Madrid el rodaje de dos capítulos de Hospital Central, la serie de médicos de Telecinco, en los que dará vida a una bióloga que combatirá un brote de legionela.
Al evento sólo estaban invitados los "medios serios" según los definió la propia Ana, y fuera se quedaron todas las cámaras de televisión y los fotógrafos no acreditados. Aunque casi desde el principio de la reunión con los periodistas quedó claro que no quería hablar de su vida privada y de los últimos acontecimientos, la actriz tuvo tiempo de dar algunas pinceladas sobre el tema.
La bióloga recibió a los medios muy metida en su papel, con bata azul, acreditación en el pecho y el guión de la serie en la mano. La actriz no quiso colgarse medallas, aunque tampoco restarse méritos "lo último que hice no tuvo éxito, pero nunca he bajado del 35% de audiencia". La actriz piensa que la televisión ha evolucionado muy bien desde el año 85, cuando ella empezó en este medio, aunque dijo no admirar la tele "cuando se llena una hora con basura".
La bióloga asegura que en su papel le ha pasado como en la vida "con esta cara que tengo que todo el mundo me cuenta sus problemas". Obregón aseguró que tiene pendiente elegir entre dos series que podría protagonizar y una película para después del verano. Además, dio veracidad a los rumores de que Ana y los 7 podría volver, diciendo que "algo hay de eso, hay dos cadenas interesadas".
Ana habló muy orgullosa de su pequeño, que tiene muchas actividades de interpretación en el colegio, "ahora están con Bertolt Bretch" aseguró. Ana está ejerciendo de mamá y dijo que su hijo "tiene una madre muy bien formada, que le puede ayudar en interpretación y en biología".
La serie, sin embargo la ha afectado un poco. "Estoy súper hipocondriaca, ahora estoy en casa limpiando las bañeras, que es donde está la legionela". Eso sí, aseguró que los últimos acontecimientos de su vida, como las escuchas telefónicas en las que al parecer solicitaba que le dieran una paliza a Jaime Cantizano, no han afectado a su vida profesional: "lo que digan siete personas de entre 48 millones no me afecta nada" y aconsejó a la gente de la calle que "no se crean nada".
Para finalizar, ha asegurado también que no le molesta para nada que le llamen "Antoñita la fantástica" y que hace poco le regalaron el libro.
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios