La Saeta, el avión en el que viaja el Real Madrid habitualmente, vivió ayer su primera gran celebración con el equipo blanco.

El Madrid viajó de Pamplona a Madrid envuelto en una fiesta que se alargó hasta altas horas de la madrugada.

Dentro del avión madridista no cesaron los gritos de "Campeones, campeones", mientras iban subiendo uno a uno los jugadores y la directiva del Real Madrid.

Pero, según señala el diario Marca, uno de los cánticos que más se oyeron fue el de "¡Laporta, quédate!", entre bromas, por parte de los jugadores blancos, que hacían así un guiño a su máximo rival.

Poco antes de llegar a tierra, los gritos se tornaron en un "Que viva España", con el que ponían pie en tierra madrileña.

En el bus, cánticos para Raúl

Pero no sólo hubo fiesta blanca en La Cibeles. El avión que transportó al Madrid desde el Reyno de Navarra al aeropuerto también se convirtió en escenario de la locura blanca por la consecución de la Liga.

Uno de los protagonistas fue Raúl. Sus compañeros no se olvidaron de él y le corearon con el ya famosos "¡Raúl, selección!".

Tampoco se olvidaron de Samuel Eto'o y le recordaron eso de "¡Eto'o, cabrón, saluda al campeón!".