Oviedo se estira, surgen nuevos barrios y para adaptar las líneas de autobús municipales sin replantearlas enteras se hace encaje de bolillos.

Pasa con la L-5. Se amplió el trayecto para pasar por Las Campas y ahora tarda 5 minutos más hasta Uría. Hay más viajeros y paradas, pero no más vehículos y se mantiene la frecuencia de 20 minutos.

Así, los conductores se esfuerzan para no llevar retraso.

Además, En Las Campas hay muchas familias con bebés y también bastantes vecinos que van en silla de ruedas. En el bus caben dos carritos o sillas, así que quedarse en tierra no es nada raro.

Nota: 5

Próxima entrega: Gijón-Línea 10