Adentrarse en la sabana africana o ir hasta la isla de Madagascar sin salir de la ciudad de Valencia será posible a finales de febrero. En ese momento, el Bioparc abrirá sus puertas al público, ya que hasta el mes de diciembre, sólo los escolares podían visitar las instalaciones.

Habrá visitas guiadas para los niños y los jubilados, así como entrada libre para los más aventureros.

Además, se desarrollará un programa educativo para alumnos desde segundo de Primaria a segundo de Bachillerato «para que conozcan, a través de juegos y actividades, cómo es el entorno natural en el que viven los animales», como explica a 20 minutos la directora de educación del Bioparc, Olga Bellón.

Al recinto se podrá acceder por la avenida Pío Baroja. Allí estarán las taquillas para sacar la entrada, cuyos precios, como 20minutos.es ya adelantó, serán muy parecidos a los de l’Oceanogràfic.

El recinto, según adelantan fuentes del Bioparc, se abrirá «también por la noche durante los meses de verano para poder mostrar a los animales nocturnos que habitan en el parque».

Uñas y púas reciclables

La visita al nuevo zoo de Valencia comienza con una proyección de documentales sobre los animales que hay. Después, los visitantes cruzan una pasarela de más de 140 metros de longitud que conecta con el recinto de la sabana. Allí se puede encontrar desde el facoquero, más conocido como Pumba, hasta la hiena manchada, la mangosta o el rey de la selva, el león.

En la zona hay un anfiteatro que servirá para realizar presentaciones y monográficos, es decir, los cuidadores llevarán hasta allí a mamíferos y aves para enseñarles a los más pequeños cómo viven y sus curiosidades: las uñas que mudan y las púas que pierden los puercoespines.

A continuación, ya se visita la zona de África y Madagascar, en la que se puede ver a los elefantes en su entorno natural, así como al lemur y al vari blanquinegro, entre muchos otros.