La línea de tren que realiza el trayecto Oviedo-Infiesto salió ayer, como cada día, a las 13.30 horas de la estación de tren de Oviedo. Pero el viaje no era igual al de otros días. Sin saberlo, los viajeros iban sentados en un tren conducido por Sonia Marcos, la primera mujer maquinista en los más de 40 años de historia de Feve.«Es un orgullo para mí, estoy muy satisfecha y espero haber abierto el camino para otras mujeres», declaró Sonia, de 27 años, justo antes de iniciar su primer viaje a los mandos de un tren. Para llegar hasta aquí tuvo que superar una formación de cinco meses, entre las clases teóricas y  las prácticas. «Al principio me faltaban manos, pero luego fui cogiendo soltura», aseguró esta joven gijonesa a la que la idea de ser maquinista siempre le había atraído.  Hasta que un día se preguntó: «¿Por qué no probar?», y se presentó a las pruebas.