Cuando solo faltan dos semanas para el retorno de The Walking Dead, cuya octava temporada comenzará su segunda mitad el próximo 25 de febrero, los fans ya temen por el posible funesto destino de otro de los personajes principales.

Después de que la primera tanda de capítulos finalizara con el anuncio de una muerte inesperada (sobre todo porque el personaje que va a fallecer aún tiene un importante peso y tramas importantes en los cómics), ahora se avecina otro posible deceso por motivos muy alejados de las necesidades narrativas.

Al parecer, la actriz Lauren Cohen, que da vida a Maggie en la ficción zombi, habría pedido un importante aumento de sueldo que la AMC se niega a aceptar, así que las dos partes mantienen negociaciones desde hace varias semanas.

Cohen habría pedido ya en otras ocasiones igualar su salario al de sus compañeros Andrew Lincoln (Rick) y Norman Reedus (Daryl). Aunque ella entró en la segunda temporada y no en la primera, es actualmente uno de los personajes más veteranos y carismáticos.

Según revelan en Deadline, la AMC le habría propuesto a la actriz un ligero aumento de sueldo que ella habría rechazado. Además, Cohen estaría leyendo ya guiones de episodios piloto de otras series.

Su contrato finaliza este año, por lo que, de no llegar a un acuerdo, Maggie tendría que desaparecer de The Walking Dead en la novena temporada de la serie.