La delegada de Economía, Innovación, Ciencia y Empleo de la Junta en Cádiz, Gema Pérez, ha indicado que Andalucía es una de las comunidades españolas con mayor cantidad de talleres artesanales, concentrados especialmente en las provincias de Córdoba, Sevilla y Cádiz, según ha informado la Delegación de Economía, Innovación, Ciencia y Empleo en Cádiz a Europa Press.

Actualmente, la provincia cuenta con una Zona de Interés Artesanal declarada oficialmente por la Junta, concretamente el núcleo que abarca los municipios de Ubrique, Prado del Rey, El Bosque y Benaocaz, con talleres que, predominantemente, realizan trabajos de marroquinería con la piel.

Asimismo, en Cádiz se localizan dos talleres declarados Puntos de Interés Artesanal, ambos en la localidad serrana de Grazalema. Uno de ellos se dedica al tejido en bajo lizo, y el otro, a la cerámica.

Además, la provincia cuenta con cinco maestros artesanos reconocidos, esto es, el artesano individual en quien concurren méritos extraordinarios relacionados con su experiencia profesional, mantenimiento de un oficio o la promoción de su actividad artesanal. De estas cinco personas, tres son mujeres. El mayor número de maestras mujeres, como ha explicado la delegada de Empleo, se trata de una particularidad respecto a otras provincias andaluzas.

La mayoría de maestros artesanos se dedica al oficio de la cerámica, si bien en la provincia también son muy reseñables los oficios vinculados a la marroquinería, la bisutería y la carpintería.

Desde el Gobierno andaluz se apoya al sector artesanal, entre otras, con una orden de subvenciones que incentiva el asociacionismo, la promoción comercial y la modernización en la artesanía. Los resultados de esta convocatoria en su última edición resuelta, la de 2016, arrojan para Cádiz la concesión de 107.692 euros para apoyar al sector artesanal gaditano.

Estos incentivos, dirigidos tanto a empresas artesanas como a asociaciones, federaciones y confederaciones de artesanos sin ánimo de lucro, tienen como objetivos incrementar la comercialización de productos artesanos, modernizar los talleres y empresas, fomentar el empleo en el sector, promover una mayor representación de la mujer en el mismo e impulsar el asociacionismo en todos sus niveles.

Las actuaciones apoyadas comprenden la adquisición de materias primas, maquinaria, el diseño y edición de catálogos, y el alquiler o la remodelación del taller artesanal. Como se explica desde la Junta, estas subvenciones están recogidas en el II Plan Integral para el Fomento de la Artesanía en Andalucía, una herramienta fundamental con la que el Gobierno andaluz hace una apuesta clara para garantizar la modernización, crecimiento y consolidación de un sector que es fuente generadora de empleo, un medio de cohesión social y que posee un indudable valor cultural, económico y social.