En los cómics y las películas, Wayne Manor es la residencia de Bruce Wayne, más conocido como Batman. Se habla comúnmente de ella como una gran mansión situada en las afueras de Gotham City y cuidada por Alfred Pennyworth, un excelente mayordomo. Ha pertenecido a la familia Wayne durante generaciones.

Los terrenos de la finca incluyen una amplia red de pasajes subterráneos, que Bruce descubrió cuando era niño y que sirven de base a sus operaciones. Allí se encuentra emplazada la batcueva. El sistema de acceso difiere según la película. En los tebeos se llega allí a través un reloj de pared que se encuentra en el estudio. También hay una colina que sirve de hangar para los vehículos aéreos de Batman, así como una salida al río para el batbarco.

Un terremoto que asoló Gotham City destruyó parcialmente la mansión, que tuvo que ser reconstruida. Batman la convirtió en una verdadera fortaleza, una mezcla de edificio gótico y castillo medieval. Tenía paneles solares para asegurarse la energía y un helipuerto.

Pese al lujo de la mansión y a su impresionante arquitectura, en las historias escritas entre 1960 y 1980 Batman no vive allí, sino en un ático en el centro de la ciudad, en el edificio de la Fundación Wayne.