La profesora de la Universidad de Burgos (UBU) Asunción Cifuentes ha sido la encargada de leer el acuerdo adoptado por el Pleno, en el que se insta además al cumplimiento y ampliación, si se considera necesario, de los compromisos adoptados de reubicación y reasentamiento de las personas refugiadas.

La proposición plasma las medidas reflejadas en el manifiesto '#SinSalidas' elaborado y presentado por diferentes organizaciones, como Cáritas Diocesana, Médicos sin Fronteras y Ayuda en Acción, entre otras, con el objetivo de garantizar que la reforma del Sistema Europeo Común de Asilo (SECA) no suponga una rebaja de los estándares internacionales de los Derechos Humanos.

El texto también busca la supresión de la exigencia de visados de tránsito a las personas que proceden de países en conflicto y que se asegure que la política de cooperación al desarrollo se centre de forma exclusiva en la lucha contra la pobreza y la desigualdad, al considerar que la ayuda oficial al desarrollo no se puede condicionar al control de las fronteras, ni desviarse a otros fines.

Por otro lado, pretende el cumplimiento del Tratado del Comercio de Armas, el fomento de la cultura de la paz y la aplicación del diálogo para la resolución de conflictos, así como la mejora del sistema de acogida y la garantía de las vías de acceso legales y seguras.

Finalmente, busca garantizar el respeto a los Derechos Humanos y el acceso a la protección internacional en la frontera sur y proteger a las personas refugiadas y migrantes, especialmente a aquellas que se encuentran en situación de vulnerabilidad.