Según ha informado este cuerpo, los hechos ocurrieron el sábado 2 de septiembre a las 7.45 horas en la avenida Balares. Una llamada alertó al 092 de las molestias que estaba generando un vehículo estacionado con la música muy alta.

Los agentes comprobaron que el conductor mostraba señales de haber bebido en exceso y le practicaron la prueba de alcoholemia arrojando una tasa de 1,18 mg. En un primer momento, el detenido informó de que estaba indocumentado y facilitó otra identidad que correspondía a la de un hermano suyo.

Los agentes se percataron y entonces el joven confirmó que conducía con el permiso retirado. Finalmente, inmovilizaron el vehículo y detuvieron al hombre.