La locura por la moda de los fidget spinners parece no tener fin, y últimamente ha preocupado incluso al gobierno de los Estados Unidos, concretamente a la Comisión de Seguridad de Productos de Consumo del país.

Según informa CNN, ha habido varios casos de asfixia relacionados con estos juguetes, además de dos incidentes con spinners con batería que se incendiaban o se derretían.

"Mientras la agencia investiga algunos incidentes asociados con este producto, los usuarios y los compradores potenciales deben tomar algunas precauciones", aclara Ann Marie Buerkle, directora de la Comisión.

"Manténgalos fuera del alcance de los niños pequeños, los spinners pueden romperse en pequeñas piezas que pueden causar asfixia; y los niños mayores no deben nunca llevárselos a la boca", destaca Buerkle.

En cuanto a los nuevos spinners que funcionan con baterías, la Comsisión destaca que "nunca deben dejarlos cargando sin estar presentes, usar el cable y el cargador que venga con el producto y no desconectar rápidamente el spinner una vez esté cargado completamente".