Se indigna, con razón, José Antonio Senarega porque el carril-bici que va de Valencia a Pinedo, a la altura de Nazaret, ha permanecido «intransitable» durante un mes largo, debido a la acumulación de barro de las lluvias. Se lamenta también de que el mismo carril-bici tenga tramos sucios y en mal estado, «de manera permanente», cuando atraviesa Pinedo.

«Es peligroso utilizarlo», advierte. Sospecha que el mantenimiento de este servicio urbano depende del Ayuntamiento y pregunta dónde está el servicio municipal que «actúa en menos de 72 horas». Para más indignación de José Antonio, resulta que el carril-bici que ve ahora en mal estado y falto de mantenimiento ocasionó una inversión de dinero público de 1,1 millones de euros, hace apenas dos años.

Las obras, que se aprobaron con el tirón inversor de la Copa del América en 2005 se sufragaron con fondos de la Conselleria de Infraestructuras y Transportes. El Ayuntamiento de Valencia no participó por ser éste proyecto de ámbito comarcal. Hay dos más de la misma naturaleza, con su punto de partida en Valencia: uno con dirección a Meliana y otro hacia Torrent.

El Ayuntamiento de Valencia dice que no tiene nada que ver con la queja que plantea José Antonio, escudándose, precisamente, en que es un servicio comarcal y no municipal. «La Conselleria es la única responsable» de los defectos de obra o de mantenimiento que puedan darse en este carril-bici», sentencia un técnico del Consistorio. Categórico, se inhibe igualmente de cualquier compromiso en cuanto a la limpieza del vial en cuestión. Asegura que la Conselleria «tiene contratado un servicio para este menester», aunque no puede identificar la empresa contratada.

La Conselleria no responde

A la Conselleria de Infraestructuras y Transportes le viene muy cuesta arriba atender a las preguntas que se le trasladan sobre la cuestión que nos ocupa. Durante toda una mañana, un directivo dice haber intentado trasladar la incidencia a sus superiores. Al concluir la jornada no se ha avanzado nada y se pospone seguir la intentona el día siguiente. Pero tampoco da resultado el día después. No salen técnicos a la palestra ni directivos que expliquen a qué se ha destinado el 1,1 millón de euros, sí el carril-bici es impracticable porque llueve o, peor aún, porque sople la brisa del mar.

Este ultimo punto lo aporta un veterano miembro de la plataforma Valencia en Bici, Fernando Mafé. No se explica, dada la millonaria inversión, que el tramo que va en paralelo del Paseo de Pinedo hasta una antigua fábrica de plásticos, «se encuentre siempre inundado de arena de la playa, por poco viento que sople».

EVALUACIÓN DE LA RESPUESTA:

Ayuntamiento de Valencia: aprobado

Conselleria de Transportes: suspenso

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