Así, según ha informado la Delegación del Gobierno en un comunicado, la víctima denunció que estaba recibiendo llamadas de teléfono en su terminal cuyos interlocutores le reclamaban relaciones sexuales. También informó que los reclamos sexuales provenían de una conocida página web de contactos personales con la que no tenía vinculación alguna.

La investigación policial verificó la existencia de 157 anuncios injuriosos insertados en la red, así como la identidad del autor de tales reclamos publicitarios perjudicando gravemente el honor de la denunciante y otras personas.

Una vez se localizó al presunto responsable de las injurias, se ha procedido a su detención descubriéndose que el móvil de tal comportamiento había sido el despecho amoroso, pues el detenido había conocido a una mujer, con la que tuvo varios encuentros y se enamoró de ella, pero no era correspondido.

De este modo, logró apoderarse de su agenda electrónica y utilizó a sus contactos como referencias para reclamos sexuales a través de anuncios en una conocida red social.