Según ha explicado la Comisaría en una nota, han sido intervenidas además de las plantas de marihuana, 480 euros en efectivo, transformadores, lámparas halógenas de 600 vatios, fertilizantes y utensilios para el cultivo de la droga.

Las investigaciones se iniciaron a principios del mes de mayo cuando los agentes tuvieron conocimiento de que un clan familiar se dedicaba al cultivo y tráfico de marihuana en el interior de un domicilio en la calle Atlántida.

La residencia contaba con un sofisticado sistema eléctrico que tenía una instalación "perfectamente habilitada" para el cultivo de la droga "enganchada ilegalmente a la red eléctrica y realizada de forma que no podía ser vista desde el exterior".

Gracias a las indagaciones desarrolladas, los investigadores lograron identificar a las personas encargadas del cuidado y mantenimiento de la plantación. Durante el desarrollo del operativo se llevó a cabo el registro de la casa hasta que se localizó en la cochera una construcción "que hacía imperceptible la plantación de la sustancia estupefaciente".

Dentro de un búnker fueron descubiertas 220 plantas en fase de crecimiento y 109 plantas en fase de secado. El acceso al interior del zulo fue complicado ya que la puerta se encontraba oculta tras un mueble en la cocina. La investigación continúa abierta y no se descartan nuevas detenciones.