Shiplu Ahmed, su mujer Rita y sus dos hijos, uno de 10 años y otro recién nacido, son los únicos habitantes del bloque del número 13 de la calle Lancaster del Raval, muy próxima al Palau Güell de Nou de la Rambla y a la misma Rambla. El resto de inquilinos del inmueble, una docena, en estado ruinoso "por falta de mantenimiento actual y en el pasado", en el que viven y que se resisten a abandonar, han sucumbido al acoso inmobiliario al que les ha sometido la empresa MK Premium, desde que esta adquiriera la finca hace un año para convertirla en pisos de lujo para alquiler o venta a turistas.

A pesar de que el bloque ya se encuentra en obras para acondicionarlo para sus nuevos usos y precios, los Ahmed no cesan en su empeño de seguir habitando en la calle Lancaster y por ello han anunciado este martes en el Col·legi de Periodistes de Catalunya junto a su abogado, Andrés García Berrio, que han presentado una querella por 'mobbing' o acoso inmobiliario contra la empresa de inversión patrimonial ante el juzgado número 7 de Barcelona.

Los 5.000 euros que MK Premium le ha puesto sobre la mesa a los Ahmed no les han disuadido de denunciar su situación y de querer seguir con su contrato de alquiler, vigente hasta el año 2019, y de mantener un arraigo en el barrio del Raval, en el que el hijo mayor está escolarizado. Proceden de Bangladesh, él es cocinero, y la familia se reagrupó hace un año.

Uno de los ejemplos de acoso y de delito de "coacciones" a los que se ha referido el padre de familia fue el hecho que los nuevos propietarios les dejaran de acceptar el alquiler. García Berrio ha ido más allá: "Es muy complicado vivir en esa finca, y más con dos niños pequeños. No hay suministros", ha indicado. Tampoco tienen ascensor y el resto de puertas están tapiadas. Su vivienda mide 47 metros cuadrados.

Denunciaron al Ajuntament el estado de ruina y de inhabitabilidad, pero la queja se saldó con "multas irrisorias" por parte del Consistorio, que realizó inspecciones, a los antiguos propietarios y que no ha llegado ni a cobrar.

La entidad vecinal Resistim al Gòtic, presente en la conferencia de prensa, han remarcado que la problemática que padecen los Ahmed se está contagiando al resto de la calle, pasto de la especulación de viviendas, y al resto de la ciudad.. Los números 7, 9 y 11 de Lancaster también están a la venta y sus 40 vecinos están preocupados.

Una de estas vecinas afectadas ha intervenido para denunciar que en estos números, y también en el 24, muchas de las inquilinas son "madres solteras con niños" y que la acumulación de fincas abandonadas y cerradas es preocupante a la vez que chocante teniendo en cuenta las situaciones de "emergencia habitacional" existentes en el Raval.

Las condiciones en las que viven esta cuarentena de vecinos diariamente suponen convivir con humedades, agujeros en los techos, paredes y suelos, suciedad e instalaciones de suministros básicos con casi un siglo de antigüedad.

Tanto García Berrio como el abogado Martí Cusó, de la plataforma Resistim al Gòtic, han pedido al Consistorio que abra una mesa de negociación sobre la problemática de la calle Lancaster y que junto a la Generalitat y al Parlament de Catalunya "regulen el alquiler" para evitar casos como este.

Leiva 37. Fueron los primeros en hacer público que iban a "expulsarles" de su casa. El Ajuntament de Ada Colau compró el edificio "de forma excepcional" el pasado 26 de mayo por 2,75 millones de euros haciendo uso del derecho de retracto.

Entença 151. El pasado 7 de junio ocho familias denunciaron que no les renuevan el contrato de alquiler porque el propietario del inmueble vende el edificio a un fondo inversor ante la revalorización de esta zona cercana a la Modelo.