En declaraciones a los medios de comunicación antes de presidir la asamblea de la federación, García Palacios ha recordado que la producción de patata en Asturias es principalmente para autoconsumo, por lo que la colaboración ciudadana es esencial frente a esta plaga, que ha pasado en un año de 13 a 40 municipios entre Galicia y Asturias. "Hay que tomarlo muy en serio", ha remarcado.

Además, ha señalado que la concienciación con el problema deben tenerla tanto los productores profesionales como los particulares, apostando por extender el control no solo a las plantaciones sino también al almacenamiento. "Puede dejar de plantarse pero la polilla puede seguir viviendo comiendo patatas de otros lugares. Hay que tomar todas las medidas que sean necesarias y los ayuntamientos estamos dispuestos, aunque suponga un trabajo extra", ha argumentado.