De acuerdo a la providencia dictada por el Juzgado, a la que ha tenido acceso Europa Press, está previsto que ese mismo día declaren la denunciante, el citado mando policial investigado por estos hechos y varios testigos, concretamente dos intendentes y un inspector de la Policía Local de Granada.
En su denuncia, consultada por Europa Press, la inspectora sostiene que está siendo objeto de "acoso laboral debido a discrepancias y rencillas anteriores", "agravadas" por su condición de mujer, y sitúa los hechos a raíz de que fuera cambiada de destino, alegando que no se le asignaron claves de los ordenadores del nuevo puesto, ni mesa, ordenador, teléfono o despacho. Al tiempo que tuvo que estar "dando vueltas por los pasillos" pidiendo su taquilla.
Agrega que el trabajo que se le ha asignado es de rango inferior al suyo, de subinspector; un cargo que también aparece según afirma en los cuadrantes del servicio diario, lo que ha generado "cachondeos, burlas y humillaciones" por las que ha sufrido un "cuadro de ansiedad agudo".
La denuncia también hace hincapié en que el reglamento interno de la Policía Local recoge que los turnos se establecerán a primeros de año, para todo el año, sin embargo a ella se le cambiado el que tenía de 8,00 a 15,00 horas y se le ha pasado a semanas de mañana y semanas de tarde, con el "consiguiente perjuicio", para su vida "personal y familiar". Destacando además que en la tarde es "la única inspectora que trabaja en el cuartel".
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