La Administración Trump se plantea un nuevo cambio de política para separar a las familias que entren ilegalmente en territorio estadounidense, y apartar a las madres de sus hijos.

Según una propuesta que está siendo estudiada por el Departamento de Seguridad Interior y a la que ha tenido acceso la agencia Reuters, el objetivo de la Casa Blanca sería disuadir a las mujeres inmigrantes de tratar de entrar en el país con sus hijos.

De acuerdo con tres funcionarios consultados con la agencia, esta nueva política permitiría mantener a los padres detenidos mientras enfrentan su proceso de deportación o solicitan el asilo, mientras los niños son puestos bajo custodia del Gobierno.

Actualmente, las familias que entran ilegalmente al paìs y son detenidas obtienen su libertad con rapidez y se les permite permanecer en Estados Unidos mientras sus casos de deportación o asilo son resueltos.

Según Reuters, los republicanos piensan que las madres se arriesgan a tratar de entrar en EE UU con sus hijos porque saben que ello les garantiza esa pronta libertad en territorio estadounidense. Las organizaciones de derechos humanos, por el contrario, denuncian que lo hacen para alejar a los menores de la endémica violencia en varios países centroamericanos.

Cn todo, las fuentes consultadas por Reuters han aclarado que se trata de una propuesta y no hay nada decidido oficialmente. La Administración Trump prepara nuevos decretos contra la inmigración después de que su primera medida, el polémico veto a siete países de mayoría musulmana, fuera bloqueadas por los tribunales.