El equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Valladolid trabajará este fin de semana sobre las dos opciones planteadas por Adif como alternativas a la liquidación de la Sociedad Valladolid Alta Velocidad (SVAV) para poder acudir a la reunión que mantendrán sus representantes este viernes en Madrid con Adif y Renfe con "una idea clara".

Así lo han explicado este viernes el alcalde de la ciudad, Óscar Puente, y el teniente de alcalde y concejal de Urbanismo, Manuel Saravia, después de reunirse con el presidente de Adif, Juan Bravo, en la Casa Consistorial.

El responsable del Administrador de infraestructuras ferroviarias ha presentado al equipo de Gobierno dos opciones alternativas para que las dos entidades dependientes del Ministerio de Fomento, Adif y Renfe, salden la deuda pendiente de la SVAV y ejecutar un proyecto de integración ferroviaria en la ciudad.

Así, se plantea llevar a cabo bien un soterramiento parcial de dos kilómetros -1.200 metros al sur y 1.100 al norte, con la estación Campo Grande en superficie- o una integración "blanda" con actuaciones urbanísticas en los 'bordes' de las vías e infraestructuras que mejoren la permeabilidad.

Así, en la reunión de este martes los miembros del equipo de Gobierno van a tratar de perfilar "en lo posible" para acudir a la Junta General Extraordinaria del día 16 con un acuerdo "beneficioso para la ciudad, para los socios, para los trabajadores de los talleres" y que "aporte realismo a la operación", ha recalcado Puente, que cree que serán capaces de alcanzar dicho acuerdo.

En opinión de Puente, los escenarios alternativos que pone Adif sobre la mesa "se parecen bastante" a lo que el Ayuntamiento de Valladolid había defendido durante el pasado año. De hecho, el borrador de plan de viabilidad que planteó el Consistorio hace unos meses planteaba las opciones del soterramiento parcial con la estación en superficie y la actuación de permeabilidad sin túnel, además de otras opciones de túneles más largos o el Plan Rogers.

Óscar Puente ha recalcado que este proyecto, encargado por el equipo de Gobierno del Partido Popular al arquitecto británico Richard Rogers, le parece "ciencia ficción" pues según los últimos cálculos supondría unos costes adicionales de 700 millones de euros.

Aunque el regidor no quiso renunciar públicamente al Plan Rogers esta mañana, pues aseguró que ninguna hipótesis estaba descartada, unas horas después, el presidente de Adif explicaba en un encuentro con los medios de comunicación que todos los socios de la SVAV -Adif, Renfe, Ayuntamiento y Junta de Castilla y León- estaban de acuerdo en que para la viabilidad de la sociedad es necesario "dejar de lado" este proyecto.

En todo caso, Puente mostró su reproche a que "algunos" en el Ayuntamiento quieran "soterramiento sí, el Plan Rogers y dos huevos duros", en referencia al Grupo Municipal Popular, por lo que ha ironizado que si dicen "cómo pagar 1.100 millones de euros", estaría "encantado" en llevar a cabo este proyecto tal y como se planteó durante la etapa de Francisco Javier León de la Riva.

Sobre las opciones que plantea Adif, Manuel Saravia ha valorado que se plantee que se financien con aportaciones de los presupuestos de las administraciones y no con otra financiación bancaria y ha apuntado que las estudiarán "durante todo el fin de semana".

"HÁNDICAP" EN EL SOTERRAMIENTO PARCIAL

El edil de Valladolid Toma la Palabra ha matizado que, en el caso del soterramiento parcial, observa el "hándicap" de que la rampa de salida o entrada al túnel coincidiría aproximadamente con el tramo entre la calle Labradores y Pajarillos, una zona que a su juicio necesita tener más "permeabilidad", lo que sería complicado con la presencia de la rampa.

La liquidación, han advertido Puente y Manuel Saravia, todavía es una opción que "está sobre la mesa", pero el edil de Toma la Palabra ha destacado el hecho de que las entidades del Grupo Fomento vayan a hacerse cargo de la totalidad de la deuda pendiente, algo que ha recordado que el equipo de Gobierno reclama "desde hace más de un año".

Pero Manuel Saravia ha apuntado que en el caso de la liquidación todavía habría que "discutir" las cantidades que reclamaría Adif al Ayuntamiento en materia de actuaciones urbanísticas y gastos financieros -42 millones de euros-.

Mientras tanto, Óscar Puente ha reflexionado que la SVAV ha sido requerida por los bancos del pago de un importe de 404 millones de euros, de modo que "como cualquier sociedad que no tiene recursos para atenderlo está en situación legal de concurso", pero ha recalcado que el hecho de que sea legalmente impecable no implica que sea "la solución más racional y más beneficiosa".

De hecho, ha aseverado que un concurso de acreedores es "la peor de las soluciones para Renfe y Adif", motivo por el cual entiende que ahora estén todos de acuerdo en intentar evitarlo. "Tienen unos talleres que poner en valor y hay un mínimo de responsabilidad para no dejar situación empantanada", ha añadido Puente, que ha ejemplificado que una hipotética subasta del nuevo complejo de talleres y su compra por parte de una empresa privada "sería un escándalo tremendo".