Según informa el Colegio de Abogados, el nombramiento ha partido de la propuesta del que fue decano, José Rebollo Puig, que la Junta de Gobierno del Colegio ha asumido como propia en base a méritos relevantes justificativos. Así, Rafael Sarazá Padilla causó alta como ejerciente número 831 en el Ilustre Colegio de Abogados de Córdoba el 27 de octubre de 1955, en cuya situación se mantuvo hasta su fallecimiento el día 26 de octubre de 2016.

En octubre de 1961 fue elegido miembro de la comisión creada para la reforma de locales y biblioteca del Colegio; en diciembre de 1961 fue elegido bibliotecario, cargo en el que cesó estatutariamente en enero de 1967; en marzo de 1970 fue elegido comisionado de la Junta de Evaluación Global Tributaria para el ejercicio anterior; en junio de 1972 fue designado vocal del Comité de Libertad en el ejercicio Profesional, y en marzo de 1976 fue elegido en Junta General Extraordinaria del Colegio, vocal del Comité de Cultura.

Con fecha 14 de junio de 1988, la Junta de Gobierno, a propuesta del director de la Escuela de Práctica Jurídica, le expresa su felicitación por "la relevante y desinteresada colaboración prestada como profesor de la misma, con encomiables celo y eficacia", felicitación que consta igualmente en los años académicos sucesivos.

Posteriormente, el 13 de marzo de 1990 se le concede el Premio 'Plácido Fernández Viagas', en su VII edición, por su actuación en defensa de los valores constitucionales, destacando "tanto su trayectoria en la aplicación de la legalidad, como su dimensión cívica en nuestra sociedad".

Desde el año 1983 fue profesor de la Escuela de Práctica Jurídica, donde impartió clases de práctica del ejercicio de la abogacía en los procedimientos penales; en junio de 1993 fue nombrado por el Consejo Rector de la Escuela de Práctica Jurídica director de la misma.

AL CGPJ

Mientras, en noviembre de 1994 fue nombrado vocal del Consejo General del Poder Judicial, a propuesta del Pleno del Congreso de los Diputados entre juristas de reconocida competencia con más de 15 años de ejercicio profesional. Por ello, con esta fecha pasó a la situación de colegiado no ejerciente.

Tras ello, en abril de 1996 se reincorporó al ejercicio de la profesión como ejerciente y a la dirección efectiva de la Escuela de Práctica Jurídica, a la que había continuado prestando toda la asistencia que su cargo le permitía. Con este motivo y por su labor desempeñada se le rindió homenaje el día 17 de mayo de 1996.

Cabe destacar que estaba en posesión de la Gran Cruz de la Orden de San Raimundo de Peñafort, concedida por Su Majestad el Rey (Real Decreto 638/1996, de 12 de abril); en junio de 1996 fue reelegido por el Consejo Rector como director de la Escuela de Práctica Jurídica, por un nuevo mandato de tres años, y desde 1996 a 1998 dirigió la revista 'Calle de Letrados', que edita el Colegio de Córdoba, de la que ya había sido coordinador en su primera época.

En su expediente personal destacan frecuentes mociones e iniciativas sobre temas profesionales, tales como los trabajos preparatorios del Congreso de la Abogacía de León (1970); defensa de las libertades en el ejercicio profesional (1971); reforma de la legislación de procedimiento laboral (1972); trato de los abogados en las oficinas judiciales (1973); situación de la justicia y ejercicio profesional (1986); acceso al turno de oficio de los diplomados de la escuela de práctica jurídica (1997), etc.

En concreto, el Colegio de Abogados detalla que pasadas las Fiestas Navideñas se procederá a la entrega del título a la familia de Rafael Sarazá Padilla.