El consejero de Sanidad de la Junta de Castilla y León, Antonio María Sáez Aguado, ha vinculado este martes la supresión de un médico de guardia en la localidad burgalesa de Villadiego a la falta de personal sanitario en la bolsa de empleo de la provincia.

Sáez Aguado, quien se ha reunido en la Diputación de Burgos para analizar esta cuestión con el presidente de la Institución provincial, César Rico, y el alcalde de Villadiego, Ángel Carretón, ha remarcado que la decisión adoptada "no se debe a un recorte presupuestario".

"El problema no es el número de plazas que se dispone", ha aseverado Sáez Aguado, antes de explicar que para mantener dos turnos de médico de guardia en la localidad era necesario disponer de cuatro médicos de área a tiempo completo y ha señalado que, en estos momentos, no hay ningún candidato en el Área de Salud de Burgos.

En este sentido, el consejero de Sanidad ha asegurado que el problema que se registra en Villadiego se está produciendo también en otras provincias como la de León y Zamora y, en menor medida, en Soria y Ávila.

Por ello, se ha comprometido con el presidente de la Diputación de Burgos y el alcalde de Villadiego a analizar la cuestión y a reforzar la presencia sanitaria en el municipio en los "momentos puntuales" que se consideren precisos.

Antonio María Sáez Aguado ha aprovechado su presencia en Burgos para recordar, además, que la provincia cuenta en la actualidad con cerca de 160 médicos de familia y 82 facultativos de área, en la línea de las ratios del resto de la Comunidad.

El consejero de Sanidad ha sido recibido a las puertas de la Diputación de Burgos por un grupo de manifestantes que pedía la restitución del segundo médico de guardia en Villadiego y el fin de los recortes sanitarios en el medio rural.