Tras unas horas de deliberación, el jurado finalmente declaró que el acusado es culpable, con siete votos emitidos frente a dos miembros del Jurado que no lo consideran tal.

Andrés Silvente, el abogado que ejerce la defensa, ha explicado a Europa Press que con la nueva reforma del Código Penal la pena solicitada por el Ministerio Fiscal de cinco años de prisión se rebaja a dos, por lo que previsiblemente no ingresará en la prisión.

Al ser una pena mínima se permite solicitar la suspensión, pero condicionada al pago de la responsabilidad civil subsidiaria de esos 13.000 euros presuntamente robados.

Igualmente, ha afirmado que está a la espera de que el magistrado presidente del Jurado emita la sentencia y entonces estudiarán si recurren o no.

El sargento de la Guardia Civil reconoció que él era el responsable de custodiar el dinero, que lo guardó en un cajón personal de su despacho y cree que lo cerró con llave pero cuando descubrió que el montante había desaparecido, dos semanas después, no contó nada a sus superiores porque tuvo "miedo y pánico".