Cerca de 800 personas han pasado la noche a bordo de un ferry que tuvo que atracar en Cartagena a causa de una avería y está previsto que esta mañana sean evacuados tras recibir el reembolso del coste de sus billetes por parte de la naviera.
Según han explicado fuentes de la Policía Nacional, el ferry, que cubría la ruta Tánger-Barcelona-Génova, tuvo que atracar anoche en el muelle de Santa Lucía debido a problemas mecánicos, y no podrá continuar el viaje.
Los cerca de 800 pasajeros del buque son en su mayoría de nacionalidad marroquí, en muchos casos familias enteras que regresaban a Europa tras pasar sus vacaciones en su país de origen.
Durante la noche, ha explicado la Policía, se han vivido momentos de tensión puesto que los pasajeros se negaron a abandonar el buque hasta que no recibieran el reembolso en metálico de las cantidades abonadas por sus pasajes y las indemnizaciones correspondientes.
De madrugada el cónsul de Marruecos llegó a un acuerdo para que los pasajeros que no viajaban con vehículo propio en el ferry, unos 60, fueran trasladados en autobús hasta Barcelona.
Control de extranjería
El resto de los pasajeros permanecen aún en el buque y está previsto que esta misma mañana reciban el reembolso de sus billetes y se dirijan a sus destinos en sus propios vehículos.
Al tratarse en su mayoría de ciudadanos extranjeros, la Policía ha tenido que montar un dispositivo de control de extranjería, similar a los que hay en los aeropuertos, para el control y registro de estos viajeros.
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