Unas doscientas personas se concentraron este domingo en los alrededores del 'banco okupado' del barrio barcelonés de Gràcia, donde se registraron momentos de tensión porque los Mossos d'Esquadra cargaron tras agresiones como el lanzamiento de latas y piedras. Como resultado de los enfrentamientos, nueve personas han resultado heridas, entre ellos siete mossos.

La sede de una antigua sucursal bancaria fue desalojada la semana pasada por orden judicial, lo que originó enfrentamientos entre los días 23 y 25, entre la policía y colectivos okupas, que se han vuelto a concentrar este domingo.

Varias furgonetas policiales rodearon el 'banco okupado', que se encuentra en el cruce entre Travessera de Gràcia y el final de la calle Verdi de Barcelona, que en ese tramo cambia su nombre por el de Mare de Dèu dels Desamparats.

La Policía cortó el tráfico en esta zona y estableció un cordón de seguridad alrededor del local por el que impidió el tráfico rodado y de peatones.

La concentración comenzó alrededor de las doce del mediodía en la cercana plaza de la Revolució, donde se encontraba la concejal de la CUP en el Ayuntamiento de Barcelona María José Lecha.

Paulatinamente, los manifestantes, en su mayoría jóvenes, intentaron acercarse al local, donde toparon con un cordón policial que les impedía el paso y comenzaron a corear diferentes consignas contra la policía.

Al cabo de unas dos horas, algunos manifestantes lanzaron harina, agua, piedras y latas contra la policía, que repelió la agresión, lo que ha generado algunos momentos de tensión en la zona.

A partir de las 18.30 h, centenares de activistas se han concentrado en Gràcia para recuperar el 'Banc Expropiat', que fue 'desokupado' el lunes. Las diputadas de la CUP en el Parlament Anna Gabriel y Eulàlia Reguant y los concejales del partido en Barcelona Josep Garganté y María José Lecha han acudido al lugar.

Pasadas las 18 horas, los activistas más cercanos al cordón policial instalado ceca del local retrocedieron de repente hasta la cercana plaza de la Revolució. Desde allí ha partido la manifestación a las 18.30 y han seguido por la calle Ramón y Cajal; sin incidentes, pero gritando consignas contra los Mossos.