Los ojos de una joven latinoamericana que ve su imagen en un espejo con el lago del parque del Retiro al fondo; un niño que juega en la calle con sus matrioshkas rusas; el mariachi mexicano que toca en la Puerta del Sol...  Son imágenes del Madrid cotidiano, del día a día de una capital bañada en mil colores y acentos y que descubre su multiculturalidad.

Todas estas escenas han sido recogidas por la lente de un grupo de extranjeros que han participado en la primera edición del premio de fotografía Mimadrid, un evento patrocinado por la Consejería de Inmigración y cuyo libro, que se puede conseguir en los centros de integración Cepis, se presentó ayer en la Casa de América.

Ouka Leele, premio nacional de fotografía, estuvo en el jurado: «Me sorprendió el nivel de todas las fotografías, su belleza y profundidad», dijo.