La caída del andamiaje instalado en la fachada de un edificio en el centro de Santander arrastró ayer tarde parte de las balconadas del inmueble y dejó convertida la estructura de los andamios en un "amasijo" de hierros.

A pesar de tratarse de una zona habitualmente concurrida y con dos comercios en los bajos del edificio, no se registraron heridos, según informaron fuentes de los Bomberos Municipales. Los efectivos del parque santanderino emplearon cerca de cinco horas en retirar los restos del andamiaje y los cascotes que podían desprenderse de la fachada del edificio, ubicado en la esquina de las calles Burgos e Isabel la Católica.

La operación obligó a cortar el tráfico por la zona, tanto el dirigido hacia las calles San Luis e Isabel la Católica, como el de cambio de sentido que utilizan, entre otros, algunos autobuses municipales. Los bomberos recibieron el aviso de la caída del andamio pasadas las cinco de la tarde.

Se trataba de una estructura metálica de nueve alturas colocada en la fachada de un edificio de seis plantas. Según indicaron las mismas fuentes, los andamios se soltaron de sus fijaciones en la fachada y cayó parte de la estructura arrastrando también consigo dos de las balconadas.

La dotación desplazada hasta la zona, ayudada por una escala y por el brazo articulado, tuvo que ir cortando y retirando los hierros desde la zona superior a la base. Después, colocó tablas, a modo de quitamiedos, en las zonas en las que cayeron las balconadas. La operación culminó alrededor de las diez de la noche.

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