El área de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Huesca ha reducido la presencia de estorninos un 93,27 por ciento en diez años, pasando de una población media mensual de 104.000 ejemplares en enero de 2006 a 7.000 ejemplares en enero de 2016.

El consistorio oscense ha explicado en una nota de prensa que la colonia estable de estas aves que permanece en los límites del municipio es de estornino negro autóctono, "más inmune a las medidas de disuasión utilizadas".

Estas cifras han sido obtenidas del estudio realizado por la empresa Ambién Pirineos S.L., adjudicataria de la contrata para el control de población de estas aves, donde se precisan las medidas aplicadas y la efectividad de cada una de ellas.

La última campaña de control de estorninos 2015-2016 ha tenido lugar entre septiembre del año pasado y febrero de este y se ha actuado en diferentes espacios de la ciudad donde estas aves tienen tendencia a anidar.

Concretamente, se ha trabajado en el Parque Miguel Servet, con 77 actuaciones, y en el Hospital Provincial-Parque del Encuentro, con 58, además de en 23 zonas fuera de estos dos parques, como la plaza Cervantes —70 actuaciones—, la zona de Téxtil Bretón —54—, la antigua guardería de Perpetuo Socorro —52 actuaciones—, la rotonda del Mulo —36—, Ramón y Cajal —30—, Parque de los Olivos —17— y en otros 17 espacios.

TÉCNICAS

Estas actuaciones han consistido en utilizar diferentes técnicas para ahuyentar a estas aves, especialmente, un puntero láser y altavoces que emiten los gritos de alarma que utilizan los estorninos para avisar de un peligro. En total, esta combinación se ha aplicado en 146 ocasiones.

También se ha empleado la pirotecnia a las horas del atardecer, en un total de 36 sesiones, y en otras 26 jornadas nocturnas candelas. Se ha acudido a una única sesión con cetrería, "una técnica que ha quedado eliminada del protocolo al haber sido clausurado el núcleo zoológico del Parque Miguel Servet y las águilas trasladadas a otro lugar".

Desde el Ayuntamiento de Huesca han indicado que a pesar de que esta última era la medida más popular entre la población, también es "la más cara en horas de personal y recursos económicos y una de las menos efectivas en el control de presencia de las aves". Por otra parte, en esta campaña no se ha usado el arma subsónica por lo que "ningún ave ha sufrido daños".

En total, ha habido 209 actuaciones y la población ha ido oscilando este año entre los picos de 12.000 ejemplares registrados la primera semana de noviembre de 2015 y la última de enero de 2016 y los 3.000 ejemplares registrados la penúltima semana de noviembre de 2015 y las dos últimas semanas de febrero de 2016.

Umbral bajo

El consistorio oscense ha precisado que el número de estorninos presentes en la ciudad "confirman que, en la actualidad, la población de estas aves se ha estabilizado dentro de un umbral bajo y que los grandes bandos de estorninos pintos han sido expulsados de la ciudad".

Asimismo, ha agregado que "el hecho de haber actuado en toda la ciudad ha posibilitado que estas aves no se hayan concentrado en grandes cantidades en ningún espacio urbano".

Para la campaña del próximo año está previsto que no se utilice la cetrería y se apueste por las técnicas que menos molestias causen a la población y que tengan un coste más moderado, "creando combinaciones de actuaciones que aumenten la efectividad".

La posible utilización de drones está descartada hasta que no haya un marco legal que permita pilotar drones en núcleos habitados, han concluido desde el Ayuntamiento de Huesca.