China planea eliminar los nombres extranjeros de edificios y bloques residenciales que abundan en las ciudades del país, como "Palm Springs" o "Manhattan Garden", porque "menoscaban la cultura tradicional china".

Así lo aseguró Li Liguo, director del Ministerio de Asuntos Civiles, durante una rueda de prensa, según publica el diario oficial The Beijing News.

"El nombre de un lugar representa la cultura local de la región", indicó Li, quien añadió que también hay "problemas" con los nombres de algunas calles, porque hay muchos "que no son oficiales".

"Eliminar los nombres occidentales y preservar los tradicionales ayudará a mantener la herencia cultural china", agregó.

Este ministerio aprobó una serie de medidas para prohibir que áreas residenciales o edificios recibieran nombres occidentales en 1996, pero fueron ignoradas a raíz de la eclosión de nuevos y lujosos bloques en muchas urbes chinas en las últimas décadas.

La iniciativa va en la misma línea de una directiva que publicaron las autoridades en febrero, la cual prohíbe construir edificios "extraños", bien sea por "exagerados, raros y proextranjeros", después de la proliferación de la construcción de rascacielos de formas imposibles en China en los pasados años.